TECOLOTLÁN, JALISCO. 15/MAYO/2015. En lo que va del año, en Tecolotlán, era poco común escuchar comentarios de los habitantes del municipio sobre las llamadas de extorsión que en algún momento se convirtieron en una problemática general en gran parte del Estado y del país. Sin embargo, en los últimos días esta modalidad de robo regresó.
Las llamadas telefónicas del Ing. Héctor, algún Licenciado o el típico pariente lejano que repentinamente quiere volver al país a visitar a sus familiares son las más comunes. Los secuestros virtuales o los premios ficticios en la región son poco utilizados por los delincuentes para cometer algún tipo de abuso en los hogares.
El fraude telefónico es la manera en como los delincuentes pueden obtener dinero fácil a través de amenazas y de engaños. En la actualidad, la mayoría de las personas ya no se dejan intimidar y de inmediato cuelgan, pero el miedo está presente entre la población. En algunos hogares el uso del identificador de llamadas ha permitido que las personas no contesten las llamadas de números ajenos a los de amigos y familiares para de esta manera evitarse un disgusto.
(Haydeé López Brambila)