REGION. 17 / FEBRERO / 2022. Las leyendas y creencias populares sobre sitios arqueológicos, en numerosas ocasiones propician las afectaciones a los vestigios, y en otras, hasta destrucciones de éstos.
Y es que en numerosas ocasiones, la creencia popular de que bajo las rocas grabadas por indígenas en tiempos prehispánicos, se encuentran “entierros” de figuras de metales y hasta oro, ha propiciado que numerosas personas destruyan parte de ese patrimonio cultural al acudir a realizar excavaciones furtivas.
En el municipio La Huerta, la creencia de que bajo una roca se encontraba un “tesoro” en metales, ha propiciado no solo que el sitio sea excavado, sino que hasta con maquinaria, poco antes de 1998, se haya registrado la remoción de la roca que contiene interesantes grabados indígenas.
Es un sitio localizado en el área de la ribera del río San Nicolás, cerca del límite con el municipio Tomatlán.
Hemos encontrado excavaciones furtivas en sitios arqueológicos en diversas regiones del estado, incluso en Cihuatlán.
En el municipio Cihuatlán la llamada “piedra pintada”, el sitio arqueológico más emblemático del municipio, en la década de los 90’s sufrió de algunas excavaciones en costados de la enorme roca que muestra grabados de origen prehispánico, aunque el sitio, tiene ahora más vigilancia por parte de los ejidatarios de Alfredo V. Bonfil, y habitantes de El Bonete.
En la región Sierra de Amula, algunos sitios de municipios como Cuautla, Unión de Tula, Autlán de Navarro, han sufrido daños por este tipo de excavaciones.
Es por ello que el Instituto Nacional de Antropología e Historia, no precisa la ubicación de los sitios registrados, a fin de no facilitar este tipo de actividades.
(Marco Corral)
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