AUTLAN, JAL. 12 / JULIO / 2021. Además de la suspensión del servicio por motivo de la contingencia por COVID-19, la Biblioteca Municipal Paulino Navarro en la Casa de la Cultura ha sufrido otros varios percances que la mantienen cerrada al público, un daño estructural, filtraciones de agua cuando llueve y el más reciente, el cristal roto de una de las puertas de acceso.
La encargada de este espacio público, Rocío Toscano Rosales afirmó que los problemas que ha estado presentando el inmueble se han ido atendiendo, aunque no todos se han podido resolver:
“En días pasados cayó una lluvia torrencial que hizo que se nos inundará la Biblioteca Pública, pero al día siguiente hizo presencia el presidente municipal, y él personalmente se dio cuenta de la falta de impermeabilización de la biblioteca y dio indicaciones para que se nos viniera a reparar el techo, pero aun quedó pendiente el daño estructural, para nosotros es una contingencia y no hemos podido presentarnos a laborar de manera regular a nuestra biblioteca”.
Añadió que la RED de Bibliotecas públicas del estado ya les ha pedido que sea reactivada la biblioteca para recuperar la normalidad después del aislamiento que provocó la pandemia de COVID-19, sin embargo, estaban a la espera de un dictamen sobre el daño estructural que existe en el techo del edificio:
“De parte de la RED de Bibliotecas se nos dio la indicación de que ya tenemos que regresar a la normalidad, pero no podemos abrir por esta contingencia, afortunadamente el arquitecto Pedro Cesar Mejía Sánchez nos hizo llegar de manera altruista y sin cobrar un solo peso el dictamen estructural en donde nos dice que es favorable aquí en nuestra biblioteca y que no se corre peligro de que se desplome el techo o alguna otra estructura”.
Aunado a esto, también está pendiente la compra y colocación de un cristal de la puerta de acceso, para lo cual explicó, se solicitará el apoyo de los regidores del ayuntamiento para ver si de manera personal pueden cooperar para adquirir éste cristal:
“Queda pendiente la colocación y la compra de uno de los cristales que se desplomaron en la puerta de acceso de la biblioteca, sin embargo, el regidor Nicolás Ayala se le hizo una petición para que él les hiciera llegar al cabildo de parte de aquí de nosotros de la biblioteca, en donde les estamos solicitando que cada regidor aporte de manera voluntaria una cantidad en la que se pueda reunir el total del costo de dicho cristal y además la instalación, que es de aproximadamente de cinco mil pesos, y pues estamos esperando que esto lo vean en cabildo y obtengamos una respuesta favorable”.
(Enrique López)