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Denuncian cacería ilegal de pumas silvestres en El Limón

El puma es considerado como el segundo felino silvestre más grande en México después del jaguar, y en el Código Penal Federal se establecen sanciones que podrían llegar hasta nueve años de prisión por cazar ilegalmente especies silvestres.
El puma es considerado como el segundo felino silvestre más grande en México después del jaguar, y en el Código Penal Federal se establecen sanciones que podrían llegar hasta nueve años de prisión por cazar ilegalmente especies silvestres.

AUTLAN, JAL. 28 / MARZO / 2023. En el municipio El Limón, a pesar de considerarse una práctica ilegal, dos ejemplares de puma silvestre fueron cazados presuntamente por ganaderos que perdieron algunas cabezas de ganado por el supuesto ataque de estos animales.

Los hechos fueron denunciados públicamente por Luis Eugenio Rivera Cervantes, académico del Centro Universitario de la Costa Sur y director de la Unidad de Rescate de Fauna Silvestre del mismo Centro Universitario, a través de una publicación en sus redes sociales en las que califica estos actos como algo inhumano y estúpido.

Según relata en su publicación, el maestro Rivera fue informado de la caza ilegal de estos dos pumas el pasado sábado 25 de marzo cuando le dieron a conocer que los hechos ocurrieron por separado, pero ambos en el municipio El Limón, uno en la localidad de San Juan de Amula y otro en el rancho Las Peñas, precisando además que uno de los pumas era hembra con sus crías.

En entrevista, el maestro Luis Eugenio dijo que el motivo de esta caza fue porque presuntamente los pumas atacaron y mataron algunas cabezas de ganado y los propietarios quisieron eliminar el riesgo de un nuevo ataque, sin embargo, reiteró que el mismo ser humano es quien ha estado acercando sus asentamientos a las áreas donde los animales silvestres suelen habitar:

“Estamos arrasando con los hábitat de cientos de especies, las estamos acorralando, las estamos dejando sin su hogar, sin su alimento, ¿qué puede hacer un animal que antes tenía un bosque, tenía una selva y ahora resulta que ya no tiene nada, y tiene ahora un cultivo de agave, tiene un cultivo de aguacate o tiene un fraccionamiento “ecológico”?”.

Añadió que estos felinos buscan sobrevivir, pero también hemos sido responsables de disminuir la población silvestre de especies que sirven de alimento natural para estos animales, por lo que el hambre les hace tomar la opción de atacar ganado doméstico:

“En el caso específico de estos pumas que fueron matados aquí en el municipio de El Limón, pues que las personas de verdad entiendan que si un animal silvestre, un gato silvestre mata ganado, llámese jaguar o llámese puma, lo hace por hambre, porque su alimento natural, que son los venados y los jabalíes, ya no hay, también tenemos ese problema de cazadores furtivos que les vale cacahuate (SIC) y no respetan, si el puma y el jaguar tienen su alimento natural, no tendrían por qué estar matando ganado doméstico”.

Agregó que la cacería de estos grandes felinos no se puede justificar alegando el riesgo de otro ataque o por el daño patrimonial ocasionado, ya que dijo, hay formas de capturar y reubicar a estos especímenes, y además existen seguros ganaderos que cubren estas eventualidades:

“Aun así, aunque hubiera daño por ganado doméstico, hay mecanismos para poder ir por el animal, poderlo atrapar, poderlo reubicar y no seguir ocasionando daño, y hay un seguro ganadero que cubre los daños ocasionados por esos animales y no es cobrarse justicia por mano propia”.

Luis Eugenio Rivera invitó a la población a hacer conciencia de la importancia de preservar el medio ambiente y entender que todos somos parte de un ecosistema que debe mantenerse equilibrado, advirtiendo que durante la temporada de estiaje se incrementa la posibilidad de que estos felinos se muevan de su hábitat natural buscando fuentes de agua.

“Ya estamos metidos en pleno estiaje, y entonces nuestra fauna va a estarse acercando a los núcleos urbanos porque va a buscar agua, ahorita va a ser otro problema muy grave sobre la fauna”.

El puma es considerado como el segundo felino silvestre más grande en México después del jaguar, y en el Código Penal Federal se establecen sanciones que podrían llegar hasta nueve años de prisión por cazar ilegalmente especies silvestres, ya que esta práctica se considera como un delito contra la biodiversidad.

(Alejandro Rubio Beltrán)

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