AUTLAN, JAL. 04/MARZO/2018 (REDACCIÓN) | La mañana de este Domingo, un grupo de feligreses de la parroquia de Unión de Tula estuvieron a las afueras de la Catedral de Autlán repartiendo copias de un documento dirigido al Obispo de la Diócesis, Rafael Sandoval Sandoval, en el que hacen varios señalamientos y reclamos al prelado diocesano.
En la carta abierta reclaman algunas actitudes y malos tratos que dicen haber recibido del Obispo, pero sobre todo reclaman el manejo que se ha dado al caso del Padre José Guadalupe Santos Pelayo, quien fuera encargado de la Parroquia de Nuestra Señora del Rosario en el municipio de Unión de Tula hasta el pasado 19 de Enero del 2017, cuando de acuerdo con declaraciones del propio Rafael Sandoval Sandoval, le fue aplicada a Santos Pelayo una “medida cautelar” retirándolo del servicio sacerdotal.
Los autores de la misiva repartida esta mañana, acusan al Obispo de faltar a su palabra y se dicen preocupados por el tiempo que ha tomado la resolución del caso. “Nos preocupa también su falta de palabra y por tanto su falta de acción, desde que llegó hemos oído de usted tantas promesas, nos decepciona la palabrería mesiánica de transformación que no es mucho más que un poco de saliva en los micrófonos, sus falaces plazos de dos meses, luego de tres, ahora ya son trece, y por lo visto si se sigue haciendo la voluntad del obispo serán más, nos preocupa.”, escriben.
Acusan también que el Obispo está obstruyendo la resolución del caso: “El asunto del padre Guadalupe se le salió de las manos (…) los padrecitos nos informan de todo, hay algunos que dicen que ya desde cuando llegó la resolución del padre, que es un asunto de poder, que le está dando largas porque no sabe qué hacer (…) Sí es cierto que Roma ya respondió por qué no lo regresa.”