Érase una vez (por vez tercera) que al Capitán, a la tripulación y a todo México nos contaban un Informe, de esos que te dicen qué fue lo que se hizo durante todo el año, en qué se avanzó, qué logros se obtuvieron y pura historia bonita.
La cosa es que fueron un chorronal de números, de acciones, de avances, de cosas chulas pues, nos hablaron de un país cómo el de Alicia, de puras maravillas; eso de la fuga del Chapo, los estudiantes de Ayotzinapa, Tlatlaya, el conflicto de interés, la muerte de periodistas en todo el país, el aumento del dólar y la pobreza extrema, eso, eso es “peccata minuta” ante los diez mandamientos, ¡ah! no perdón, ante las diez acciones a seguir para hacer frente a los grandes desafíos nacionales. Con eso va a seguir moviendo a México. Al menos a mí sí.
Yo, para conseguir un sueldo que me tiene viviendo al día, sí me ando moviendo de aquí para allá, desde las 6:30 am empiezo mi peregrinar de escuela en escuela, sufriendo por la #malditamilvecesmalditalíneatresdeltrenligero, por los baches, por las mil obras de infraestructura electorera que cierra calles y las explota para poner “bolardos” y zonas de baja velocidad que a los conductores les vienen quedando guangos. Sí, sí nos están moviendo a México, pero al “despeñadero” dijera alguna vez el Peje.
En fin, hoy voy a confesarles dos verdades: yo los domingos no me baño, (así como decía la Shakira en su canción), nomas lo hago cuando voy a salir a algo importante, y la segunda confesión es que yo sí voy a misa, como ustedes saben el polizón va a escuela monjil y la misa del domingo viene en el examen del lunes en la mañana, así que lo acompaño como uno de mis deberes de progenitora.
Sucedió que hoy me percaté que todo mundo va a misa muy bañado, muy peinado y perfumado, yo como siempre acudí en chancla, carita lavada y con apenas una camisetilla de estilo hipiosillo. Por un momento me sentí mal, pero el sacerdote en su discurso o sermón (cómo se llame) dijo que a Yisus no le importa la limpieza exterior, sino la limpieza del alma, la interna. El polizón volteó y me dijo: «ya vez mamá, no importa que vengas sin bañarte, lo importante es que vengas».
Ojalá tanto el informe de gobierno cómo en la limpieza del alma, la intención fuera lo que contara para mover a México.
Mi reporte dominical Juaquin.
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